Con otra vibrante victoria ante Brasil, esta vez 11-9, la selección argentina de waterpolo alcanzó la medalla de oro en el Sudamericano que se desarrolló en el complejo Parque Olímpico en Buenos Aires. Con nutrido aporte de jugadores de GER, el representativo nacional logró el escalón más alto del podio de manera invicta y volvió a pisar firme en esta parte del continente. 

Iván Carabantes (capitán de los Yacarés), Tomás Galimberti, Esteban Corsi, Juan Pablo Montané, Tomás Echenique, y Guido Martino le otorgaron un perceptible acento rosarino al elenco albiceleste. 

Este clásico del waterpolo sudamericano le impregnó un marco emotivo, caliente, y disputado a una gran final, que había tenido su adelanto en la etapa clasificatoria, cuando el elenco albiceleste también había superado por 9-7 a los brasileños. Los conducidos por Daniel Poggi repitieron el paso triunfal en el duelo decisivo y fueron claros merecedores del título. 

En los cotejos anteriores, el dueño de casa había vencido 18-1 a Uruguay en la semifinal, 9-7 a Brasil, 12-9 a Colombia, 28-1 a Uruguay, 27-1 a Chile, y 36-1 a Paraguay. 

>> Difícil de explicar 

“Realmente es muy difícil explicar con palabras las sensaciones que tenemos. Sentimos una alegría enorme”, confió Tomás Galimberti, capitán de GER e integrante de la selección albiceleste, quien destacó las complicaciones que atravesaron los deportistas de alto rendimiento durante la pandemia por el coronavirus.  

“Después de un año y medio, con un parate muy largo, fue muy difícil para todos los deportistas. Algunos se llegaron a replantear si debían seguir la práctica del deporte. Otros entrenábamos en los livings de nuestras casas. Hubo un esfuerzo muy grande para poder superar esa situación”, comentó Galimberti.  

Y expresó: “Pero por suerte, llegan este tipo de enormes alegrías, te llenan de felicidad y te dan ganas de seguir jugando toda la vida”. 

En relación a la obtención del trofeo en condición de local, el jugador mens sana resaltó que “haber ganado en casa fue especial”. Y explicó: “Hacía mucho que no le podíamos ganar a Brasil en nuestra casa, y que no conseguíamos un Sudamericano en casa. Y lo logramos invictos. Estamos super contentos”. 

“Seguramente, con el tiempo nos iremos dando cuenta de lo que logramos. Siempre quedan cosas por mejorar, pero este es un paso muy importante para que el waterpolo nacional siga creciendo”, subrayó Galimberti.  

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